jueves, 16 de octubre de 2014

REQUETEJOTÀDIDO. Juan Josè Bocaranda E




RÈQUETEJOTÀDIDO
       Juan Josè Bocaranda E

Cuando Rufino Layres ingresò como profesor de Derecho en la Universidad de…, uno de sus mayores enemigos gratuitos fue el pomposo doctor Belarmino Balarte, quien quiso humillarlo. Para realizar este nefando plan, “comisionò” a una muchacha alumna de ambos, quien interrumpió la clase un dìa y preguntò a Layres, en voz alta, si tenía postgrado y cuàl era èste. Sin inmutarse, Layres le respondiò:
-No. No tengo ni dos minutos de postgrado en toda mi vida
-¿Por què?
-Porque no me hace falta.
La muchacha corrió hacia el inquinoso para darle a conocer la respuesta. De ahì en adelante, la rabia gratuita  contra de Layres se transformò en odio evidente. Entonces se abocò a la tarea de desprestigiarlo ante colegas, jueces y estudiantes, “porque no tenía postgrado”.
Dos años después, por cosas del destino, Layres fue nombrado Asistente de la Sala de Casaciòn Penal de la Corte Suprema de Justicia. Era el segundo de a bordo del despacho; el tercer nivel lo ocupaban los abogados auxiliares.
Layres estuvo vapuleando a Balarte durante doce largos años, hasta que se jubilò, y eso que Balarte presumìa de excelente casacionista. Era muy solicitado para la formulación del recurso. Sin embargo, no ganó ni un solo caso en ese despacho, mientras Layres estuvo allì, pues como Asistente èra  èste quien elaboraba las sentencias. El Magistrado lo que hacìa era firmarlas.
La técnica de Balarte en la formulación del recurso era sumamente compleja y enrevesada, pues descomponía cada denuncia, de forma o de fondo, en dos, tres o cuatro subargumentos, para complicar las cosas y vencer por cansancio. Pero, no pudo con Layres, quien lo dominò punto a punto y sin que ni el Magistrado ni la Sala le tachasen ni una sola coma a los proyectos de sentencia elaborados por èl.
-Asì se tapa la geta  a los pajudos: con hechos, no con palabras- dijo Layres- …Los postgrados no valen por sì solos…Hace falta algo màs, pero no voy a decir què…
Por eso lo tuve rèquetejotàdido durante doce años…A mì nadie me... "acompleja"…



sábado, 4 de octubre de 2014

LOS AMIGOS. Juan Josè Bocaranda E




LOS AMIGOS
Juan Josè Bocaranda E

-¡Amigo Bermùdez!
-Sì, amigo Orellano
-¿Por què decidió venirse para la capital y dejar de vender huevos en el mercado de San Cristòbal?
-Està muy equivocado. Quien siempre ha vendido huevos en el mercado ha sido su señora madre, amigo Orellano.
……
Otro dìa:
-¡Amigo Bermùdez!
-Sí, amigo Orellano
-Usted y yo comenzamos a estudiar Derecho en esta Universidad hace cuatro años. Yo voy por cuarto año, mientras que Usted no ha pasado de segundo. ¿Por què no se dedica a otra cosa?
-Sì, amigo Orellano. La ciencia jurídica supera mis escasos alcances intelectuales. Para llegar a medioconocer lo que es la ciencia del Derecho es preciso ser todo un Einstein. Por eso proyecto tomar un pequeño curso de reposterìa, para hacer tortas como su señora madre…
….
Otro dìa:
-¡Amigo Bermùdez!
-Sí, amigo Orellano
-¿Què piensa hacer cuando se gradùe de abogado?
-No lo sè todavía, amigo Orellano
-¿Por què no se va ejercer la profesión en Periquea, mi pueblo?
-¿Què podrè hacer yo en ese cagadero de mulas, amigo Orellano?
….
Otro dìa, muchos años despuès:
-¡Amigo Bermùdez, què agradable sorpresa!
-Sí, amigo Orellano
-¿Què hace, amigo Bermùdez?
-Estoy disfrutando de mi jubilación, en el Ministerio de Sanidad, amigo  Orellano
-¿Què? ¿Estuvo fumigando mosquitos de la malaria durante tantos años?
-No, amigo Orellano. Fui consultor jurídico del Ministerio. ¿Y Ud. què hace?
-Ando por ahì, como se dice…
-Ah. Entonces anda “pelando”…Asì terminan los mal intencionados, amigo Orellano…